El científico e inventor Alexander Hartdegen pretende demostrar que los viajes a través del tiempo son posibles. Una tragedia personal que lo ha sumido en la desesperación explica su deseo de volver al pasado. Pero la máquina de su invención, en contra de sus deseos, lo lleva al futuro, concretamente a 800.000 años después, donde descubre que la humanidad se ha dividido en dos bandos: los perseguidores y los perseguidos.